Elbe Allianz e.V. da la bienvenida al acuerdo sobre el Elba entre Alemania y la República Checa

Con la firma del acuerdo sobre el Elba entre Alemania y la República Checa, se implementa una demanda del Bundestag alemán después de cuatro años. El objetivo es hacer que el Elba sea navegable. La Elbe Allianz considera infundadas las críticas de las organizaciones medioambientales y otros sectores.

(Berlín) El Elba debe hacerse navegable. Este es el objetivo declarado del acuerdo para mejorar la navegabilidad del Elba. El 20 de julio de 2021, el ministro de Transporte checo, Karel Havlíček, y su homólogo alemán, Andreas Scheuer, firmaron el acuerdo. Casi exactamente cuatro años después, se implementa una demanda del Bundestag alemán. Además de la implementación del concepto general del Elba (GKE), el acuerdo también prevé la elaboración de acuerdos con la República Checa. Estos deben proporcionar al país vecino seguridad sobre la conservación del Elba interior como vía fluvial internacional.

Ambos países han integrado sus bases de planificación nacional en el acuerdo. Para Alemania, el GKE con todos sus componentes es la base para los planes de expansión, mientras que para la parte checa, se asegura que las condiciones de carga existentes tengan una profundidad de agua utilizable de 2,30 m desde Ústí nad Labem y Týnec nad Labem, y la expansión adicional hasta Pardubice a una profundidad de 2,30 m.

Protección contra inundaciones y objetivos ecológicos integrados

El representante de Elbe Allianz e.V. en el consejo del proceso posterior del GKE, Stefan Kunze, está sorprendido por las reacciones actuales de las organizaciones medioambientales, así como de las autoridades estatales sobre el acuerdo. «La referencia al concepto general del Elba asegura, además de los objetivos de transporte, también una variedad, si no la mayoría, de medidas ecológicas, así como cuestiones de protección contra inundaciones y otros intereses de uso», explica Stefan Kunze. «Quizás la falta de objetivos medioambientales directos en el acuerdo sea la causa», sugiere, refiriéndose al carácter de contrato de transporte. Al mismo tiempo, las ambigüedades en la terminología entre ambos países podrían ser la causa.

Kunze señala que las cifras checas y alemanas sobre la profundidad del agua no son directamente comparables. Mientras que en Chequia, en la zona embalsada, los 2,30 m muestran una profundidad de agua realmente existente, los 1,40 m de canal en Alemania son un mero indicador de planificación hidráulica. Por lo tanto, no es posible hacer inferencias directas sobre la profundidad real del agua en el lado alemán, y además del estado de expansión, también depende en gran medida de la oferta de agua actual. «La navegación y sus clientes, por lo tanto, encuentran en parte condiciones de carga significativamente mejores, pero desafortunadamente, como en los últimos tres años, también condiciones significativamente peores.» Sin embargo, también es claro el vínculo entre las condiciones de carga y las cantidades de mercancías transportadas: sin agua, no hay carga y viceversa.

La navegación debe ser posible durante 340 días al año

«Estamos seguros de que, tras la implementación del GKE, los cargadores en Alemania y la República Checa tendrán a su disposición una ruta de transporte más fiable», describe Kunze las expectativas de la economía.

El ministro de Transporte, Karel Havlíček, subrayó los objetivos del acuerdo tras la firma. «El Elba es un importante río europeo, por el que la República Checa y Alemania son responsables. En pocas palabras, vamos a poner el Elba en el camino correcto, de modo que la navegación sea posible durante 340 días al año. El objetivo es tener la navegación en el Elba desde Pardubice hasta Hamburgo para 2030.» De este modo, el Elba se convertirá en una parte importante de la red TEN-T europea, una red de las principales conexiones de transporte de importancia europea.

Foto: © Elbe Allianz / Descripción de la imagen: El Elba en Dresde