El consorcio de carga ELVIS compensa las emisiones de CO2

La Europäische Ladungsverbund Internationaler Spediteure AG (ELVIS) y la ELVIS Teilladungssystem GmbH pueden desde hace poco referirse a un balance de CO2 equilibrado. Dado que hasta ahora no es técnicamente posible evitar completamente las emisiones de dióxido de carbono, ambas empresas han optado por una compensación. Esta se lleva a cabo desde finales de 2019 según el reconocido Gold Standard. El año pasado, ELVIS compensó casi 800 toneladas de este gas de efecto invernadero a través de inversiones en proyectos de protección climática.

(Alzenau) «El tema de la sostenibilidad es sin duda uno de los más importantes de nuestro tiempo. Y aunque la política aún no se ha puesto de acuerdo sobre cómo debe reaccionar concretamente ante la crisis climática, está claro: no puede haber un ‘seguir así'», dice Nikolja Grabowski, miembro del consejo de ELVIS AG. «No hay que ser un profeta para prever que cada daño ambiental será valorado más alto en el futuro. Por eso, desde una perspectiva empresarial, consideramos necesario actuar voluntariamente ya hoy.»

En este contexto, el consorcio logístico de Alzenau y el sistema de carga parcial con sede en Knüllwald decidieron ya en 2019 compensar sus emisiones de CO2. Para la implementación, ELVIS confió en la experiencia de la agencia de protección climática Climate Extender de Gehrden en Baja Sajonia. En el marco de un procedimiento en varias etapas, esta elaboró inicialmente balances climáticos actuales para ambas empresas y luego examinó dónde se pueden reducir las emisiones mediante medidas técnicas y/o organizativas. Posteriormente, se calculó la cantidad de compensación sobre la base de estándares internacionales. Se tuvieron en cuenta todas las emisiones inevitables generadas por las actividades diarias, desde los desplazamientos de los empleados hasta la operación del hub logístico en Knüllwald.

El consorcio compensa ahora estas emisiones invirtiendo en certificados de protección ambiental reconocidos en la medida correspondiente. A través de estos, se financian proyectos de protección climática en países en desarrollo y emergentes que demuestran que pueden fijar dióxido de carbono o evitar más emisiones, reduciendo así la carga sobre el medio ambiente. De este modo, ELVIS compensó casi 800 toneladas de CO2 el año pasado, lo que corresponde aproximadamente a las emisiones generadas por 1,000 camiones completamente cargados en la ruta de Frankfurt a Hamburgo.

Sin embargo, el consorcio no se detiene ahí. Además de la administración en Alzenau y la operación del hub en Knüllwald, a partir de ahora también se compensarán gradualmente los transportes del sistema encargados por ELVIS. «Dado que aún no existe tecnología para transportes libres de CO2, la compensación de las emisiones es actualmente el único camino viable para nosotros», explica Grabowski.

El consorcio apoya a sus socios

«Estamos convencidos de que el aspecto de la sostenibilidad es esencial para la viabilidad futura de una empresa. Sin embargo, a las pequeñas y medianas empresas, especialmente en nuestro sector, a menudo les faltan los recursos para prestar la atención necesaria a este tema», dice Grabowski. Por eso, el consorcio ha asumido ahora esta tarea para sus socios. Desde hace poco, los transportistas y cargadores afiliados pueden compensar fácilmente y de manera directa a través de ELVIS cada transporte individual.

El alcance y, por lo tanto, los costos de la compensación son calculados por el consorcio teniendo en cuenta el peso de la carga respectiva, así como el peso bruto permitido del camión, el tipo de vehículo (camión con remolque, camión solo, camión refrigerado), la carga del camión considerando las cargas adicionales, la distancia recorrida y la proporción de viajes vacíos. La compensación también se lleva a cabo aquí mediante la adquisición de certificados de la Fundación Gold Standard suiza.

Acercarse a los cargadores

Grabowski: «Con esto, nuestros socios ahora pueden acercarse a los cargadores con un concepto que está claramente definido y calculado de manera transparente. Por un lado, esto es bueno para el medio ambiente. Por otro lado, les da a nuestros socios un impulso en la discusión pública y fortalece su posición de negociación.»

Foto: © ELVIS